Días de Saint Germain

Recorrer la rue Bonaparte, imprescindible cada mañana

Les Deux Magots rodeado de luces navideñas

 Diderot en el Boulevard Saint Germain

Iglesia de Saint Sulpice, a dos pasos de Pierre Hermé

La terraza del Comptoir du Relais, todavía vacía

Una visita a Père Lachaise

Tumbas dispuestas en preciosas avenidas

Mausoleos de regusto gótico

Otra de las calles del cementerio que parece una ciudad

Desatendida pero siempre visitada

Un poco más olvidada, la tumba de los Gay-Lussac

La grandeza del recuerdo de Oscar Wilde merecería un entorno mejor...

Una amenaza junto al muro en el que fueron ejecutados los últimos comuneros

Tarde en Montmartre

Subimos la colina al atardecer

pasando por el Moulin de la Galette

Restaurantes crepusculares en cada plaza 

Algún callejoncillo con encanto nos lleva al Sacré Coeur

Dentro falta Amélie pero es todo muy parecido

Aquí nada nos recuerda a Toulouse-Lautrec

Marc Chagall en la Opera Garnier

Place de l´Opéra

André Malraux encargó a Chagall pintar la cúpula en 1964

Giselle y El lago de los cisnes

Boris Godunov

La flauta mágica

La firma de Chagall junto al homenaje a Rameau

Dafnis y Cloe